viernes, 18 de abril de 2008

Fábula de Esopo: Las ranas pidiendo rey

Cansadas las ranas del propio desorden y anarquía en que vivían, mandaron una delegación a Zeus para que les enviara un rey.

Zeus, atendiendo su petición, les envió un grueso leño a su charca.

Espantadas las ranas por el ruido que hizo el leño al caer, se escondieron donde mejor pudieron. Por fin, viendo que el leño no se movía más, fueron saliendo a la superficie y dada la quietud que predominaba, empezaron a sentir tan grande desprecio por el nuevo rey, que brincaban sobre él y se le sentaban encima, burlándose sin descanso.

Y así, sintiéndose humilladas por tener de monarca a un simple madero, volvieron donde Zeus, pidiéndole que les cambiara al rey, pues éste era demasiado tranquilo.

Indignado Zeus, les mandó una activa serpiente de agua que, una a una, las atrapó y devoró a todas sin compasión.

A la hora de elegir los gobernantes, es mejor escoger a uno sencillo y honesto, en vez de a uno muy emprendedor pero malvado o corrupto.

(Foto de Dani)

4 comentarios:

d´Agolada dijo...

Las fábulas siempre tienen razón y esta es especiamente práctica para aplicar a los políticos actuales. Aunque si te digo la verdad yo prefiero arriesgar y quedarme con un político que haga algo aunque sea mal que uno que no haga nada. UN beso. Por cierto, la flor del toxo se llama chorima, que ya me han respondido.

prometeo dijo...

En el punto medio radica la virtud. Yo es que soy republicano, y mantener a un madero flotando, más aún, a una familia de maderos y maderitos flotando... pues como que no.. La clase política es corrupta por definición, ya lo decía Platón, y desde aquella pocas cosas han cambiado. Bueno sí. Ahora no llevamos toga.
Un beso reina. Bonita foto de nuevo. Jo, yo quiero un novio así :P

Nuevo Ícaro dijo...

Es que Zeus tiene una mala sangre, como se las gasta el tío.Saludos. Ah y por cierto. ¿Prometeo esta intentando robarte el novio?¡La leche!,Ya me contaras.

Eticaniano dijo...

Una gran enseñanza. Considero que el mejor gobernante es el que tiene ética, ya que, aunque le falten otras cosas, siempre estará abierto a escuchar, negociar, ceder, buscar lo justo, aprender, rectificar,...